Daniel 11:42-43
11:42-43
“Y el seguirá extendiendo su mano contra los países, y la tierra de Egipto, no se librará. Controlará los tesoros escondidos de oro y plata y todas las cosas deseables de Egipto. Y los libios y los etíopes seguirán sus pasos”.
¿Puede un tesoro estar más escondido que a miles de metros de profundidad en el mar? El Mayor Generador de Riquezas de la Historia, es el Petróleo.
La invención del automóvil y las necesidades energéticas surgidas a partir de la I Guerra Mundial convirtió al Petróleo en pilar de la Sociedad Industrial. En 2021 la producción de petróleo supera los 60,000,000 de barriles al día, y a un valor de 92 dólares que se cotiza el día de hoy, la cifra anual es impresionante.
Con razón a este “Tesoro Escondido”, se le llama el “Oro Negro”. Conocer la historia del Petróleo nos permitirá entender las razones que provocaron la primera y segunda guerra mundial, y en la post guerra, el gran interés de los Estados Unidos en los países con abundantes reservas petroleras de Oriente Medio. Estos producían más del 40% del petróleo a nivel mundial, y el antes llamado “reino del vacío” ahora disfruta de las más fastuosas riquezas.
Con el apoyo del gobierno federal de Estados Unidos, las compañías petroleras norteamericanas se expandieron con éxito por todo el mundo junto a algunas compañías británicas o francesas.
“Y la tierra de Egipto, no se librará”. Esta tierra y en general los países Árabes se ha visto permanentemente influidos por intereses norteamericanos que, en búsqueda del control del oro negro desde la post guerra, han sufrido innumerables conflictos.
Aunque la primera y mejor Arma es la Económica. Recordemos que desde Julio de 1944 en que se lograron los acuerdos Bretton Woods, surgió el Dólar como moneda de intercambio global, respaldado por 20,000 toneladas de Oro.
Estas estaban resguardadas, en la Reserva Federal, fijando un tipo de cambio de 35 dólares por Onza de Oro, valor que se mantuvo hasta 1971. Durante el mandato del presidente Nixon, las reservas bajaron a 8,000 toneladas, por lo que este abandonó de manera unilateral la Norma Oro, que obligaba a Estados Unidos a respaldar con Oro físico cada Dólar.
Ante el riesgo de que el dólar perdiera su rol protagónico, Estados Unidos logro un acuerdo clave con los Jeques Árabes, de que, si ellos recibían como pago por su petróleo únicamente Dólares, Estados Unidos les garantizaría su seguridad. Confiando en el poderío norteamericano, la mercancía de mayor venta en el planeta el petróleo, desde entonces solo puede pagarse en Dólares, logrando así un acuerdo muy ventajoso para ambos. Este acuerdo permitió a Norteamérica, un gran cambio en su economía, con la Teoría Monetaria Moderna, bajo la premisa de que la insolvencia o bancarrota de un Estado no es posible, ya que siempre puede pagar. Y tras abandonar el patrón Oro, se pasó a un esquema SWIFT, que le ha permitido infinitos déficits presupuestarios, bastando la emisión de billetes nuevos para cubrir sus gastos.
Esta posición ventajosa y única, le ha permitido aplicar sanciones comerciales y hacer la Guerra Económica a aquellos países que no se someten a sus intereses o a los de sus Transnacionales, recordando este Imperio de la Deuda, la Diplomacia del Cañonero. En la parte final del siglo 20, y este siglo 21 hemos visto como cada vez más países y regímenes que se atreven a desobedecer las ordenes de Washington, se les aplican duras sanciones económicas y comerciales, incluyendo la prohibición de venta de medicinas a países como Cuba, Irán, Libia, Siria, Sudan, Venezuela, Corea del Norte, Rusia y China con el argumento de totalitarios y antidemocráticos.
Y no conforme con estas sanciones, haciendo gala de su poder hegemónico, a humillado brutalmente a quienes se han atrevido a proponer la vuelta al patrón Oro, como al líder libio Muamar el Gadafi, que propuso una nueva moneda, el Dinar de Oro. Inicialmente se le aplicaron severas sanciones económicas y pero ante su ineficiencia, “Extendió su mano” militarmente, con milicias prooccidentales que lo cercaron, capturaron y brutalmente abusaron sexualmente de él, en un hecho que horrorizo al mundo entero.
“Seguirá extendiendo su mano contra los países”. Por todo el planeta existen múltiples casos documentados de como se ha hecho. Durante la guerra fría en Latinoamérica, por ejemplo y bajo el amparo de la Doctrina Monroe que afirma que América es para los americanos, con el pretexto de la Seguridad Nacional, se coordinaron golpes de estado contra gobiernos elegidos democráticamente por parte de militares entrenados en una academia militar norteamericana, la desaparecida “Escuela de las Américas”, situada en Columbus, promoviendo según sus críticos, permanentes violaciones de los derechos humanos. Así fue así desde Guatemala, en Centro y Sudamérica, hasta Brasil y Argentina, según documentos recientemente desclasificados, como el conocido caso de Chile.
David Rockefeller, en sus Memorias escribe: “Lo más emblemático de esos años sombríos en América Latina fue Chile durante la presidencia de Salvador Allende a comienzos de los ‘70. Allende, un marxista confeso y líder del Partido Socialista de Chile, hizo campaña en 1970 sobre la plataforma de una reforma agraria radical, la expropiación de todas las corporaciones extranjeras, la nacionalización de la banca, y otras medidas que hubiesen puesto a su país en la senda del socialismo. La reacción del gobierno norteamericano tras la elección democrática fue inmediata. Se ordenó derrocar a Allende mediante el Proyecto FUBELT, más conocido como Track II. Una serie de documentos desclasificados de la Casa Blanca publicados en 2009 revelaron que Nixon, ofreció dinero y ayuda al dictador brasileño Emilio Garrastazu Médici para influir a las fuerzas armadas chilenas con el fin de derrocar a Allende
Y bajo el amparo norteamericano, el 11 de septiembre de 1973 a las 10:30, los tanques abrieron fuego contra el palacio de La Moneda. Les siguieron las tanquetas y la infantería. Pinochet exigió una rendición incondicional. A las 11:52, los cazabombarderos Hawker Hunter iniciaron su ataque a la Moneda, disparando en cuatro oportunidades sus cohetes sobre la casa de Gobierno. A las 14:20 de la tarde el general Palacios envió a un grupo de soldados a derribar la puerta del Palacio. Ante la situación, el presidente Salvador Allende decidió rendirse y deponer las armas. Sorpresivamente según afirmo uno de sus médicos, tomo un fusil AK-47, suicidándose.
Tras este golpe de estado patrocinado desde Washington, 17 años de dictadura militar le continuaron con más de 40,000 víctimas mortales.
En su autobiografía “Confesiones de un Sicario Económico” John Perkins narro en 2004 como mediante firmas de consultoría se presionó a muchos países para obtener control de sus recursos, y si estos no aceptaban se les sometía a procesos intensivos de desestabilización.